No te has preguntado nunca como puede ser que haya jugadores de pádel que leen tan bien las bolas, que sepan donde van antes de que boten, en como van a rebotar, que vean el agujero de forma tan clara, etc. A parte de la experiencia, tienen otra cosa que les ayuda y mucho: la visión periférica.
La visión periférica es aquella que te permite ver hasta casi 180º. Es decir cuando nos centramos en mirar en un objetivo que tenemos delante usamos la visión central, pero cuando somos capaces de mirar al frente pero también captar que está pasando fuera de nuestra visión central, ese espacio que nos rodea, se le llama visión periférica.
Para que seas consciente la visión central abarca poco más de 30º. Es decir, si yo estoy mirando fijamente a mi oponente estoy usando la vista central, pero mientras lo miro, también puedo ser capaz de ver donde esta mi compañero en la pista, si esta por delante de mi o por detrás, en ese momento estoy usando la visión periférica.
Con la visión central fijas tu vista en un objetivo, con la periférica visualizas tu entorno aunque no lo ves nítidamente. Lo que te ayuda a situarte y realizar lecturas del juego.
Una de las grandes ventajas de la visión periférica es que aunque estés golpeando la bola, por tanto usando tu visión central en la bola, tu visión periférica te ayuda a ver el hueco en el otro lado de la pista. Por tanto y como ves, tiene mucho potencial y mucho que aportar en un jugador de pádel.
La visión periférica, puede entrenarse y se mejora, y no a base de comer zanahorias. 😉
Algunos ejercicios que puedes realizar de forma sencilla para mejorarla:
- Coge un libro y subraya una palabra. Intenta leer las palabras de arriba, abajo, derecha e izquierda sin perder de vista tu objetivo, la palabra subrayada.
- Coge papel usado y haz una bola con él, intenta colocar una papelera a una distancia razonable cerca de tu visión central que miraras a un punto concreto delante de ti e intenta hacer básquet con las bolas hechas en la papelera situada en tu lateral. Si la encestas fácilmente, ves alejándola cada vez más de tu campo de visión central, para que cada vez te sea más difícil ejecutar básquet y tengas que trabajar tu campo de visión periférico.
- Mira un punto fijo en la pared a una distancia de unos 4 metros, coge una pelota de pádel y pásatela de mano a mano, sin tocarlas, es decir tirándote la pelota de una mano a otra. Puedes tener las manos cerca, y si te es muy fácil sepáralas, sin dejar de mirar en el punto. ¡A ver si consigues que no se te caiga ni una sola vez!
Espero que con estos consejos puedas mejorar tu visión periférica y que tu juego salga beneficiado. ¡Seguro que ahora entiendes mejor porqué hay jugadores de pádel que parece que lo vean todo!